martes, 17 de marzo de 2009

RECUERDOS DE LA INFANCIA

La verdad es que no sabría discernir entre lo que realmente recuerdo y lo que a base de escuchar relatos de los mayores le he ido poniendo imágenes en mi imaginación.

Mi infancia debió de ser feliz. Por aquella época no invertíamos mucho tiempo en pensar si éramos felices o no, simplemente vivíamos lo que nos tocaba. No había elección. Por eso creo que fueron felices aquellos años, pues no tengo la sensación de haber deseado que mi infancia hubiese sido de otra manera.

Mis primeros recuerdos los empiezo a situar hacia los cuatro años.No recuerdo muchas escenas, mi mente se ha centrado más en sentimientos que en hechos. No recuerdo cómo era mi primera señorita, (maestra), pero recuerdo sentirme muy querida y protegida por ella. No recuerdo las caras de las personas, pero sí recuerdo los que me querían y a los que yo quería.

Si algo malo tiene cumplir años es que nos vamos dejando personas por el camino, amigas de la infancia, que ya no están, con las que no podemos evocar nuestros juegos, nuestros secretos, ni nuestras pequeñas disputas. El paso del tiempo ha hecho que se borren sensaciones que sólo en la infancia nos está permitido disfrutar o padecer.

Me gustaría poder describir el mundo desde mi perspectiva de niña, pero mi círculo era muy reducido y mi visión en aquellos años era muy corta. No, no era sólo mi miopía la que no me permitía ver las cosas, era el aislamiento informativo al que nos tenían sometidos a los niños, y mucho más a las niñas. Nuestro afán de saber y de aprender, propio de la edad, lo teníamos muy limitado por parte de nuestros mayores.:

-"Eres muy chica, (pequeña), todavía...."
-"Cuando crezcas lo sabrás..."
-"Ya tendrás tiempo...."

Pero el tiempo pasó muy rápido y lo que no aprendimos en su momento quedó pendiente y se acumularon muchas dudas y preguntas sin respuesta.

-"Ya crecerás...." -nos decían.

Ya hemos crecido y atrás siguen estando nuestras dudas infantiles.

¿Dónde está Fulanito que me sentaba en sus rodillas para contarme historias, y ya no está?, ¿Dónde está Menganita que me invitaba a comer los dias de lluvia para evitarme la larga caminata desde la escuela hasta mi casa entre charcos y barro?

-"Cuando crezcas lo sabrás."

Ya he crecido y la angustia vivida no se olvida. Las sensaciones perduran en el tiempo. Los juegos en la calle, no, en la calle no, que soy de "pueblu", en los caminos. ¿Nuestros juguetes? Cualquier bicho que encontrábamos por el suelo (morugas, grillos, hormigas...), palos, barro, agua, cuerdas. ¿Nuestros amigos? Todos los niños del vecindario y de todas las edades que jugábamos juntos. ¿Frustraciones infantiles? Quedarte el último sin elegir en los grupos de los juegos. ¿Los enemigos? Mis hermanos dentro de casa, los mismos que fuera se partían la cara con cualquiera que osara meterse conmigo.

Infancia o niñez, ¿cuándo termina?...

Mientras vivamos tendremos mucho de nuestra infancia, ella ha sido la base de nuestra formación como personas y si tenemos la dicha de vivir muchos años tendremos la oportunidad de vivir otra niñez, pero en esta ocasión serán nuestros hijos quienes nos enseñen a salir adelante como nosotros enseñamos a nuestros mayores en su segunda infancia.

¡Ojalá así sea!

Laura González Sánchez ©
Marzo 2009




5 comentarios:

Anonymous dijo...

Hola Laura

Es un placer disfrutar nuevamente de tus letras , en donde afloran esos recuerdos que nos enriquecen el alma, y alimentan el espíritu.

un abrazo.

V:

Anonymous dijo...

Menos mal Laura, que aunque nos has privado de tu compañía, nos sigues enviando tus sentimientos. Ahora toca "La Primavera", así que a decirnos algo sobre ella.
¿Sabes que las cosas de la infancia siempre se parecen? Yo puedo ser tu abuelo, y lo que cuentas me parece que también lo he vivido, Jesús

flor dijo...

Laura,me has dejado sin palabras,maravillosa infancia la que viviste,y estupendo relato,que mas talentos tienes escondidos jajaja,gracias por seguir a nuestro lado aunque sea en la distancia,besitos.

LAURA dijo...

Yo también os quiero.
Gracias

El eco de mi valle dijo...

Laura, Qué placer leerte. Escribes muy bien
Otra cosa. Tened cautela tú y la "Asturianina" Os harán descalabraros los usuarios que ya hundieron el anterior.
Os deseo éxito.