martes, 24 de noviembre de 2009

AMIGAS

Dejadme que me presente. En estos momentos tengo sobre 12 años, soy de mediana estatura, delgada, pelo castaño, labios finos y ojos marrones.

Es por la mañana temprano, hora de ir al Colegio, Laly me llamará para ir juntas, soy como su hermana mayor, la saco cuatro años, pero nos llevamos bien. A las dos nos encanta leer cuentos y libros de aventuras. Mi casa es grande con un mirador acristalado y alargado dando al sur y por consiguiente calentito en invierno, y allí sentadas en el suelo, sobre cojines o mantas, leemos, menos una temporada que me dediqué a hacer una alfombra de nudo para mi habitación. Yo con mis lanas y ella con sus cuentos.

Otras veces voy yo a su casa y si están comiendo me entretengo también leyendo y no me entero de que hablan. Tengo dos hermanos mas pequeños a quienes les gusta, como a mí, la naturaleza y van al monte a descubrir cuevas o a pájaros que no soporto, pero lo que sí me encanta es que en nuestros cumpleaños, hacemos farolillos con papel de colores para el jardín y nuestra madre nos prepara patatas fritas como las compradas y compota de pera de un peral que tenemos. Eso sí, tengo un pequeño vicio, si se puede llamar así y es dejarla sin nata para hacer bizcochos. Mi segunda merienda es pasarme por la tartera grande de la leche y ponérmela en una rebanada de pan y bien espolvoreada de azúcar.

En verano, a veces, nos cogemos la merienda y la llevamos a otra vecina mas pequeña, entonces nos vamos al monte las tres a coger flores, moras o renacuajos que vemos en la charca junto a una fuente de agua cristalina de manantial y las metemos en el primer bote que encontramos para contemplar su metamorfosis en los días venideros.

Esta laly tiene unas cosas… no me dice un día: -¡Ya se por qué las mujeres que van a tener un niño tienen la barriga tan gorda! Es que ahí guardan la leche que les sale por las tetas para que mamen. Me eché a reír, A ver quien es el guapo que le explica que los niños no los trae la cigüeña.

Cuando llega Diciembre, hay que poner los nacimientos. Si tenemos algo de dinero ahorrado, cruzamos Torrelavega hasta una tiendecita antigua junto al Ayuntamiento, para comprar alguna figurita más de barro o casita de corcho. Lo demás es de naturaleza pura. Volvemos a salir al monte a por musgo, piedras, tierra y ramas, y por supuesto con mucha harina para la nieve y las nubes de algodón sobre cartulina azul.

Un día bajando con unos ramos de mimosas le hablo de mis miedos:

-¡No podría soportar ver morir a nadie de mi familia, preferiría morirme yo primero!

Vamos creciendo y la diferencia de edad se acrecienta. Ya me siento una muchacha enamorada.

-¡Ahí viene!

-¿Quien?

-¡El que me gusta, pero no mires!

-Si no miro, ¿Cómo quieres que sepa quien es?

-Me da igual, no mires, ¡Me muero de vergüenza!

Jamás debió de saber que me gustaba tanto. Nos distanciamos. Yo seguía con mi carrera de Magisterio y salía con mis compañeras de clase. Tengo la Carrera terminada y pongo una clase de niños pequeños en casa, pero tengo que seguir estudiando para opositar y conseguir una plaza (casi todas mis amigas ya están por pueblos enseñando) así que me quedé casi sola y volví a reunirme con Laly y sus amigas. La pedí que me ayudara una temporada con la clase para poder estudiar más. Hizo lo que pudo. Como entre los niños estaba su hermano pequeño y dos primos, a ratos cachondeo puro y duro, pero le cogieron cariño.

Aprobé, ya tengo mi plaza en un pueblo precioso y además por compañera a una amiga del Colegio. Ya solo vamos a Torrelavega los fines de semana en autobús.

Tengo 24 años. Necesitamos ir a Santander a por libros del Colegio y si cogemos el autobús encontraremos la librería cerrada, así que le pedimos a unos señores que son de allí y trabajan aquí que por favor nos lleven. A mi compañera la llama su madre por teléfono para que coja un autobús antes y la acompañe al médico.

Me voy con ellos; una mujer del pueblo nos para y nos pide que la dejemos en el siguiente pueblo para ir a la peluquería. La dejamos y seguimos ruta.
De pronto un autobús…

-¡Qué pasa! ¡Dónde estoy!

-¡Ya no veré morirse a nadie de mi familia!.

Mª EULALIA DELGADO GONZALEZ
Noviembre 2009

4 comentarios:

Anonymous dijo...

A pesar de que no estabas, tu espiritu en este escrito me emocionó, algunas cosillas coinciden con las propias, gracias por espabilar mi memoria, ¡Ah, feliz día de tu santo! Lines.

Anonymous dijo...

A pesar de que no estabas, tu espiritu en este escrito me emocionó, algunas cosillas coinciden con las propias, gracias por espabilar mi memoria, ¡Ah, feliz día de tu santo! Lines.

flor dijo...

Te echamos en falta pero tu relato nos dejo gratamente sorprendidos,genial y emocionante besitos.

Anonymous dijo...

¡Alucinante, Lali! Has cambiado de registro totalmente pero aún así sigues manteniendo eso que hace que pudiera distinguir tus escritos aunque no fuesen firmados.

María