sábado, 8 de mayo de 2010

CREACIÓN ARTIFICIAL


La muñeca Barbie siente su picardías color marfil, enrollado en la cintura. Intenta estirarlo y, ¡qué vergüenza! se han olvidado de cubrirle con las braguitas. En su arrebolada desesperación piensa que una huida inmediata será lo más decoroso ante las voluptuosas miradas.

De la lejanía , le llega, algo tenue, el fragor de cascos de caballos, tambores, timbales y trompetas. ¿A qué vendrá tanto festejo? -se pregunta.

Las expectativas de encontrar hojas de parra para cubrir su pubis, emulando a Eva, se esfuman. El viento la traslada sobre un campo verde salpicado de rojas amapolas. Aquí y allí vislumbra acebos adornados de rubíes. Quisiera posarse sobre alguna frondosa encina pues lleva tiempo siendo una cometa a merced del viento implacable. Siente náuseas por dentro y expulsa ¡oh sorpresa! sus céreas vísceras. El hedor hace que el mismo viento emita unos: uf, uf. uf y las suelta en caída libre.

El estruendo de los instrumentos musicales, ahora reconoce una tuba, al compás de las herraduras de caballos lo percibe más cercano ¿”Qué celebrarán”? ¡y ella la que fuera la envidia de todas las muñecas, yace sucia y desnuda! Ignorando su destino... ¡llora perlas de cera!

Ahora es el aire el que la lleva a trompicones. Cuatro negros cuervos la acosan. El macho le asesta un picotazo tan doloroso en la cabeza que se siente desfallecer. Luego llegan dos más grandes que atraídos por el brillo de su melena le arrancan unos mechones y se alejan graznando con sus tesoros entre las zarpas.

Tres habían sido sus ilusiones:

Exhibir las mejores prendas.

Poseer un físico perfecto.

Disfrutar de los amores platónicos de su maharahá indio, Omar. Su Querido Omar no permitiría que ella, la bella Barbie, cayera en la rutina en la que vivían las demás muñecas: manoseadas por dictadoras o empalagosas “amitas”.

Pero ¡qué ilusa has sido, Barbie! y ¡qué arrogante!. Fíjate en qué penoso estado te encuentras: abandonada sobre la hierba, casi desnuda, herida en tu orgullo. ¡Por la Blanca Dama, que llegue ya el fin!. No obstante sabe que todavía la libarán hasta la última gota de cera, le arrancarán todos los filamentos dorados que le quedan y la... desflorarán.

Una bandada de golondrinas, volando en círculo compacto, se acerca a la moribunda muñequita. Algunas se afanan en recoger semillas de amapola, otras se hacen con dos bolitas rojas. Juntan los ingredientes y le mojan los labios cárdenos, Una pareja porta con sus picos la mortaja donde años atrás envolvieron a su hijita, y cubren con ella a Barbie.

La velan en gran grupo, noche y día. Y así recatada y sedada duerme plácidamente la criaturita. Cuando abre los ojos siente que otro tipo de felicidad la inunda; ya no quiere apartarse de sus amigas. Y aunque nunca expresó credos, es consciente de que existen la bondad y el sacrificio. Se despierta en ella el sentido lúdico e ingenia juguecitos para la prole. Construye también un artilugio para facilitarles las futuras migraciones.; y cuando se halla ultimándolo vuelve a oír la música de los instrumentos y el frenado de la carroza.

La Blanca Dama se apea.

-Por fin puedo abrazarte. ¡Me alegro de que hayas cambiado tu actitud!. Despídete de tus amiguitas y pasa al mundo etéreo y disfruta del amor en todo su desenfreno.

Dos golondrinas recogen con sumo cuidado la Mortaja y el Picardías y le dedican un entusiasmado trino.

Isabel Bascarán ©
Mayo 2010

No hay comentarios: