jueves, 4 de noviembre de 2010

EL AMOR Y LA ESPERANZA

No me lo podía creer. Ahí estabas, te encontré, sin haberte buscado.

De repente, te das cuenta de mi presencia e intentas esconderte, aunque sabes que es inútil, porque ya te he visto.

Nos acercamos como dos extraños en un baile de mascaras, cada uno mirando hacia otro lado; y en unos segundos, nos encontramos uno frente a otro.

La gente pasa a través de nosotros, como si no existiéramos, como si no fuéramos parte de su vida.

Me armo de valor, busco las palabras perfectas, para que no te des cuenta que, por dentro, estoy como un flan recién hecho; respiro profundamente, te miro a los ojos… y en el momento justo que voy a abrir la boca, me interrumpes y eres tú quien habla:

LA ESPERANZA -¡Hola!

YO (el amor) –¡Hola!

ELLA -¿Qué tal?, ¿qué tal te ha tratado la gente?

YO -Bien; cuánto tiempo ¿no?, la gente no me trata, solo me usa y luego me desprecia cuando descubren el sufrimiento; a ti por lo que veo te han tratado muy bien.

ELLA –No me quejo la verdad, pero ¿mucho tiempo?, si siempre estamos juntos.

“Ya no aguanto más, tengo que preguntárselo”

YO -¿Por qué me abandonas?, cuando la gente está triste, cuando yo más te necesito. ¡Eh, contesta, no bajes la mirada!.

ELLA –Pero, ¿cómo puedes decir eso, amor?, yo no te abandono, y menos aún cuando tu más me necesitas. Sigo a tu lado, como siempre, pero cuando la gente está triste y sufre, es el amor, lo que les da esperanza.

Tras oír esas palabras me sentí avergonzado por mis dudas y más aún, por mis sentimientos.

YO –Estaba ciego, mi rabia no me dejaba ver que siempre estás ahí, amiga. Que cuando un corazón siente amargura, “tu formas parte de mi”, perdóname.

ELLA –¡Cómo no te voy a perdonar, sin amor no hay esperanza!

*Moraleja:

“El amor, es locura, pero cuando hay amargura es esperanza pura”

Jezabel Luguera González ©
Octubre 2010

2 comentarios:

Flor dijo...

No cambies ese registro de dulces palabras contadas en bellas historias,besitos.

Anónimo dijo...

Jo, Jeza, que profundo... tenías razon, este era el único que me habia saltao. Muy bonito, en serio.